¿en el lado equivocado?

Estuve con la mejor esposa de todas en un visionado en Port d'Andratx. Me entró un poco de hambre y el colega que nos enseñó una casa preciosa nos recomendó el Verico Port d'Andratx "frente al Club de Vela". No lo sabíamos, siempre nos habíamos quedado en el animado "lado turístico" de Andratx. Así que fuimos en su busca.

El restaurante está algo elevado, con un comedor acristalado en la parte delantera. Hay una especie de bar en el propio edificio, con un total estimado de 20 - 25 mesas. La sala acristalada es agradable incluso en invierno, las ventanas están suficientemente aisladas para no producir una desagradable ráfaga de frío.

Verico Puerto de Andratx

En Google, el Verico está valorado con unos muy respetables 4,8 puntos, por lo que mis expectativas eran correspondientemente altas. El menú en sí es muy reducido en invierno. Podíamos elegir entre tres platos principales. Pero me quedé prendado del interesantísimo menú degustación, cuyo precio es de 65 euros. Para la mejor esposa de todas, intentamos sacar de la cocina un filete de ternera. Luego una pechuga de pollo. Pero no se pudo hacer nada y acabó siendo una combinación de dos guarniciones, verduras a la plancha y patatas. Me pareció un poco lamentable, hubiera esperado un poco más de flexibilidad para alérgicos u otros "casos especiales" culinarios en un restaurante de esta categoría. Aunque ciertamente no se va a Verico Port d'Andratx sin probar una de las delicias del menú. Pero no todos los huéspedes son completamente libres en su decisión.

"el más fino y creativo ..."

Mi entrante consistía en queso scamorza horneado en un fino rebozado de tempura. Y que iba acompañado de una mermelada de tomate como contrapunto dulce en el plato bellamente dispuesto. ¡Maravilloso! Grandes texturas, gran sabor.

Por cierto, el queso scamorza se elabora de una forma bastante inusual: Este requesón duro, típico del centro y el sur de Italia, se mezcla con agua caliente hasta formar una pasta. Después se trenza o se le da la típica forma de pera. Para enfriarlo, se introduce en un baño de agua y, más tarde, en una salmuera de sal más o menos fuerte. Tradicionalmente se cuelga de una cuerda, pero hoy en día apenas se practica.

Emocionado por el entrante, pasé al siguiente plato. Un clásico consomé de pequeñas setas porcini, que por cierto estaban en su punto. Dentro, pasta casera tipo ravioli (he olvidado el nombre...). Un poema. Finas gradaciones de matices de sabor en la gama más champiñonada. Lo terroso, el suelo del bosque. Un plato muy fino que destacó gratamente del entrante y que a su manera fue un contrapunto pero también una gran continuación.

"...lo que la cocina italiana puede ofrecer".

El plato principal en Verico Port d'Andratx se quedó un poco corto para mi gusto. Había un pescado blanco a la plancha sobre un lecho de verduras, que más abajo terminaba en una especie de pasta de tomate. Una hoja de col escaldada se colocó sobre el pescado como guarnición, un bonito contrapunto. El conjunto podría haber sido aún más emocionante si se hubiera frito. Más sabores amargos y también algo crujiente en el plato, que por otra parte faltaba aquí.

El plato era precioso. El punto de cocción del pescado era perfecto, los sabores finos del pescado y las verduras buenos, pero un poco insípidos. La pasta de tomate en su cantidad e intensidad fue lamentablemente un no-go para mí en esta combinación. No hay problema, se puede quitar. Así que no está mal. Pero dado el alto nivel de esta cocina, ¡es una pena!

Dolce per me

Pude dejarme llevar con los postres. Me gustó que el menú degustación ofreciera un postre a elegir. Así que opté por una crème brulée de fruta de la pasión con helado de coco. Y un fondant au chocolat. El fondant era exactamente como se esperaba. La artesanía era excelente. Ninguna sorpresa, ni positiva ni negativa. Ideal para el comensal conservador.

La crème brulée, sin embargo, fue una revelación. De hecho, no del todo. Pero una consistencia agradable para mi gusto personal. Los delicados sabores de todos los ingredientes no estaban empastados por la fruta de la pasión, era una composición equilibrada. Y el helado de coco (comprado): perfecto. Un sabor fino y cremoso, no este sabor a coco a menudo penetrante. ¡Fantástico!

Precio / prestaciones en Verico Port d'Andratx

La relación calidad-precio del Verico Port d'Andratx es perfectamente adecuada. Pero ya no es muy bueno. Pagas más por el lugar y la cocina. Me pareció difícil, por ejemplo, que nos dieran pan con espuma trufada muy sabroso sin pedírnoslo. Pero más tarde apareció en la cuenta a 6,90 por persona. Sin dramas. Pero podría haberse comunicado.

Gran servicio.

Por lo demás, el servicio fue extremadamente agradable, nuestro camarero hablaba francés, español, inglés y alemán y no sólo era extremadamente amable sino también muy competente.

En resumen: "Luca y Gianfranco, nuestro equipo en la cocina, conjuran lo mejor y más creativo que la cocina italiana puede ofrecer en su plato" es, digamos, una declaración publicitaria que rebosa opulencia y confianza en sí misma. Y quizá un poco exagerado, dado que en invierno el menú es bastante limitado. En cualquier caso, Verico puede presumir de interpretar la cocina italiana de forma emocionante, creativa y extraordinariamente buena. Junto con el excelente servicio, Verico Port d'Andratx me ofrece una de las mejores experiencias gastronómicas de la isla fuera de la gastronomía de estrellas. Y eso bien merece una visita. Especialmente ahora en invierno, cuando el personal puede prestar y presta mucha atención a los pocos huéspedes.